El flujo de trabajo sin modelos ha revolucionado la fabricación dental en muy poco tiempo, poniendo patas arriba décadas de procesos tradicionales de diseño y fabricación basados en modelos.
En 2017, más del 25 % de los dentistas y laboratorios trabajaban con un flujo de trabajo sin modelos.
Aunque la velocidad de la transformación ha sido asombrosa, las razones de este rápido ritmo de adopción son sencillas: un flujo de trabajo sin modelos ofrece claras ventajas en casi todas las fases del proceso de fabricación.
Desde la toma de impresiones digitales hasta el ajuste final, un flujo de trabajo sin modelo suele ser más rápido, más preciso y requiere menos ajustes meticulosos para obtener el resultado perfecto.
Esto es lo que debe saber.
Procesos más rápidos con flujos de trabajo sin modelos
Un flujo de trabajo sin modelos impulsado por escáneres dentales totalmente digitales puede reducir significativamente el tiempo que tarda en completar un tratamiento restaurador para sus pacientes.
sus pacientes no necesitan pasar tiempo sentados en una silla esperando.
Este aumento de la velocidad comienza con el primer paso, ya que no tendrá que preocuparse de tratar con impresiones y materiales de moldeo volubles. Esto significa que sus pacientes no tienen que pasar tiempo sentados en una silla esperando a que se fije un molde, todo ello mientras prueban el material de impresión, a menudo desagradable.
Saltarse los tiempos de secado y fraguado también significa que puede empezar a examinar la impresión digital más rápidamente y puede identificar inmediatamente cualquier error de escaneado o del paciente que pueda haber llevado a un resultado subóptimo en la fabricación.
El proceso sin modelo también acorta considerablemente el tiempo de diseño y revisión. En los procedimientos tradicionales basados en modelos, a menudo hay que esperar dos o más semanas a que el laboratorio termine el artículo de restauración para poder iniciar el proceso de adaptación.
De hecho, suelen pasar uno o dos días antes de que un técnico pueda siquiera empezar a revisar las impresiones físicas, lo que supone un inconveniente a la hora de programar la cita en caso de que tenga que volver a llamar al paciente para otra ronda de impresiones.
En cambio, un proceso sin modelos puede producir fácilmente un producto final en 48 horas, e incluso en 24 horas, en los casos más urgentes.
Mayor rentabilidad
La transición a un flujo de trabajo sin modelos significa que puede prescindir de todos los suministros y equipos necesarios para un proceso de fabricación basado exclusivamente en impresiones.
Desde resinas y equipos de mezcla hasta bandejas de impresión y mucho más, se pueden vaciar estanterías enteras de suministros que ya no son necesarios.
Esto significa que la inversión inicial en equipos de escaneado digital puede amortizarse rápidamente, y además ya no tendrá que preocuparse de pedir y hacer un seguimiento de tanto inventario para sus procedimientos basados en impresiones.
las estanterías enteras de los almacenes pueden vaciarse de suministros que ya no son necesarios.
La facilidad del proceso de escaneado también significa que su consulta puede confiar más en los técnicos y demás personal, liberando a los médicos para que se centren en la atención al paciente, lo que acelera el rendimiento general y las actividades de concertación de citas.
Mejor comunicación entre técnicos y dentistas
Gracias a la información inmediata que proporcionan los procesos de escaneado digital, puede empezar a comunicarse con sus médicos en cuanto termine de escanear. Las exploraciones digitales también pueden ampliarse y examinarse con todo detalle, lo que permite a los médicos identificar las áreas problemáticas de forma rápida y sencilla, sin retrasar aún más el flujo de trabajo.
Esta dinámica de comunicación más rápida continúa en el proceso de fabricación, cuando su laboratorio puede notificar fácilmente a su consulta cualquier problema, lo que facilita las consultas en tiempo real para ajustar el resultado final según sea necesario y garantizar un buen ajuste para sus pacientes.
Mejor calidad de producción
Para muchos protésicos dentales, la mayor ventaja de los flujos de trabajo sin modelo es la mayor precisión que se obtiene al prescindir de los moldes físicos. Ya no tendrá que preocuparse por las distorsiones y las imprecisiones del modelo, y cualquier error en el escaneado puede identificarse inmediatamente y corregirse con la misma rapidez.
Muchos dentistas afirman que han podido reducir a la mitad el tiempo de consulta.
Con menos ajustes y mayor precisión desde el principio, los plazos de entrega pueden reducirse drásticamente, y muchos dentistas y laboratorios afirman que han podido reducir a la mitad los tiempos de colocación.
Tanto si busca reducir costes como acelerar los flujos de trabajo o aumentar la precisión, los procesos de fabricación sin modelos ofrecen importantes ventajas en todos los ámbitos.